Vaya por delante una sincera afirmación de amistad fraterna,
solidaridad e hispanismo con la República Argentina. Lo saben bien los amigos
argentinos y pueden intuirlo todos los que conocen la historia de nuestro país y
saben que hubo un tiempo en que éramos uno. En la segunda mitad del siglo XX,
Argentina ha tenido mala suerte y, de tener lugares que podían rivalizar con
París y Nueva York, fue perdiendo posiciones hasta llegar al siglo XXI, inaugurado
con “el corralito”, en donde parece claro que Argentina no ha tenido los
gobiernos que se merece, sino más bien una plaga de oportunistas sin escrúpulos
que la han saqueado y sumido en una sima de la que el país pugna por salir.
En los años 70, empezaron a llegar en distintas oleadas
otros exiliados que, inevitablemente, cuando se les preguntaba algo te decían:
“estuve con los montos… me picanearon”.
Eran -o decían ser- “montoneros” o, genéricamente “guerrilleros”. La mayor
parte, eran unos cantamañanas que aprendieron pronto que, en aquellos años en
los que, en España, ser de izquierdas era casi una obligación, así que se
presentaron como homólogos “picaneados”. De creer en su militancia, los
montoneros debieron tener cerca de 100.000 activistas.... Pocos años después,
la opinión pública española, había variado extraordinariamente su percepción
sobre “los argentinos”. El actor bonaerense Federico Luppi que pasó por España
en esos años, comentó que cuando le alquilaron un piso en Madrid se sorprendió de
que no le pidieran más que a otro español para formalizar el contrato: “Señora -dijo a la casera- que soy argentino…”. Hasta ese punto
había llegado la mala fama de la diáspora argentina en aquella época.
Tras el secuestro y cobro del rescate al multimillonario
Jorge Born por los montoneros, una parte de la dirección animó a sus militantes
en el exilio a volver al interior del país para “reemprender la lucha”. Todos
fueron detenidos en la frontera. Los miembros de la dirección -que la lógica
dice que estaban en el secreto de las delaciones- se repartieron el dinero de
los Born. Fidel Castro se quedó una parte y otra fue devuelta años después a la
familia Born. Una parte quedó en manos de Mario
Firmenich, el máximo dirigente montonero, que terminó estudiando económicas
en España y residiendo en Cataluña (ahora mismo, en Vilanova i la Geltrú) en
donde hoy sigue.
Cuando llegamos al siglo XXI, Argentina sufrió el famoso
“corralito” y el número de exiliados económicos se multiplicó. En ese momento,
empezaron a llegar a cascoporro individuos que, sin tener absolutamente ninguna
convicción política, sino un deseo de sobrevivir, se fueron alineando a la
izquierda (que siempre se ha mostrado mucho más enternecida por los “exiliados
económicos” que la derecha). Parecía como si Argentina expidiera en dirección a
la Madre Patria a personajes de tercera o cuarta fila que, sin tener
preparación política, ni siquiera bagaje cultural suficiente, se apalancaron en
partidos de izquierda, buscando, a falta de principios ideológicos sólidos, un
simple acomodo a la sombra del poder. Los conocemos todos, las opiniones de
algunas son excéntricas e ignorantes hasta lo grotesco.
Pablo Echenique, por ejemplo, antes de ser secretario de organización de Podemos, había militado en Ciudadanos… partido diametralmente opuesto. Hombre que pregona una sociedad más justa, no debió creer que su asistenta personal merecería disfrutar de los derechos laborales reconocidos en España y que le valió la reprobación del pleno del ayuntamiento de Zaragoza, ciudad de la que era concejal. Habitualmente, los tuits de este pobre hombre son un canto reiterativo a los tópicos progresistas que, para colmo, reflejan su absoluto, total y palmario desconocimiento sobre la historia de España… y sobre la lógica aristotélica.
Por algún motivo que se nos escapa, pero que, desde luego,
no tiene nada que ver con ideas políticas, varios de estos elementos han
participado en el “proceso” independentista catalán. Tal el caso de Gerardo Pisarello, hijo del dirigente
radical argentino Ángel Pisarello desaparecido durante el régimen militar, seguramente
por haberse caracterizado en la defensa de numerosos montoneros y troskystas
del ERP en la zona de Tucumán. Primer teniente de alcalde de la ciudad de
Barcelona, y concejal por “Catalunya en Comú”, el partido dirigido por la
Colau, de cuya ejecutiva es miembro. En su biografía aparece como “impulsor del
Procés Constituent”. Sería mucho decir que la responsabilidad de la degradación
de Barcelona en los años en los que Pisarello ha sido teniente de alcalde, se
deben solamente a él, pero sí que es cierto que la orientación
pro-independentista de una parte de “Catalunya en Comú” es su responsabilidad.
Fundador del chiringuito DESC (Observatorio de los Derechos, Económicos,
Sociales y Culturales), en el que participa también la Colau y que es uno de
los principales receptores de fondos municipales: 150.000 en 2015, 254.777 en
2016, 267.016 en 2017 y sigue en aumento. Pisarello también ha sido el que ha
desviado fondos municipales a DiomCop, la “cooperativa de manteros”: ¡450.000
euros solamente en 2017!
Si Pisarello tiene el título de Derecho, su paisano Albano Dante Fachín, también “miembro
del proceso constituyente de Cataluña”, muestra un curriculum en Internet ambiguo
en relación a sus estudios: “abandonó la
carrera sin acabarla para iniciar el proyecto Cafeambllet”… ¿Qué es ese
proyecto? No “es”, fue una simple hoja de publicidad gratuita que resultó
multada en alguna ocasión por los tribunales por “atentar contra el honor” de
personas relacionadas con la sanidad (repetía chascarrillos de pueblo nacidos
en el entorno del Hospital comarcal de Blanes). La revista se repartía en Blanes
y La Selva. Fachín suele elogiar el trabajo que realizó en esta hojita diciendo
que ha desvelado “escándalos en la
sanidad de Blanes”, pero lo cierto es que la revista se mantuvo gracias a
las subvenciones: entre 2009 y 2011 recibió ayudas de casi 30.000 euros. Sin
olvidar que, en la Cataluña nacionalista, allí donde se rasca sale algún pufo. El
último número se publicó en julio de 2015. En 2018, fue fichado como tertuliano
del RAC1, pasando de criticar al “Grupo Godó” a colaborar con él. Se apuntó a
Podemos sin renunciar al “proceso soberanista”. Fue elegido diputado del
parlamento de Cataluña en 2015, siendo luego nombrado secretario general de
Podemos en Cataluña… organización a la que dejó en la estacada pensando que el
“proceso” seguía siendo un negocio con más futuro y con un mejor pesebre en la
región. En octubre de 2018 entró en el “Consejo Asesor para el Impulso del Foro
Cívico y Social para el Debate Constituyente”, otra de los organismos pesebristas
creados para “petarse presupuesto” de la gencat y ofrecer unos recursos
razonables a sus promotores… Este es el que, dando muestras de su nivelazo
intelectual, cuando el juez le preguntó su profesión, tras dudarlo, no
mencionó, ni el Caféconleche, ni su trabajo como tertuliano del RAC, sino que
optó por presentarse como “parado”, eludiendo la utilización de la expresión y diciendo:
“he trabajado en la obra… como camarero…
y precario”. No estuvo, desde luego, en su momento más inspirado. El
cálculo de Fachín es que, echar una mano a los procesados puede venirle bien en
el futuro… si de lo que se trata es de vivir del pesebrismo.
Finalmente, esta muestra de personajes pintorescos y tristes arribistas llegados de la República Argentina, se completa con Lucía Caram Padilla, más conocida como “sor Lucía Caram”. Oriunda de Tucumán y de antecedentes libaneses, dice en su biografía que “fue duramente castigada por la represión militar”, sin mayor especificación. Vive desde hace 27 años en España y reside en el Convento de Santa Clara de Manresa. Desde allí “promueve el diálogo interreligioso” (participó en el II Parlamento Catalán de las Religiones.) e impulsa la “Fundación Rosa Oriol que atiende a 1400 familias desfavorecidas”. Hay que decir que Rosa Oriol es la joyera de la firma Tous. ¿Las aficiones de la monja? “se manifiesta contra la corrupción, a favor de los más pobres, a favor de los políticos presos en Cataluña, y a favor de la independencia de Cataluña. Además, ha hecho declaraciones a favor de los homosexuales y sobre su posibilidad abierta de incorporarlos dentro del matrimonio convencional, así como a favor de la acogida de inmigrantes y refugiados en España”, dice estar “contra la sociedad machista y patriarcal” y sostiene que la Iglesia “debe renovarse para afrontar el aborto y los métodos anconceptivos”. Vamos, el paradigma completo del “progre”. Y además, anda entre pucheros para el Canal Cocina. A la vista de este historial, uno se pregunta qué tiene que ver todo esto con la Iglesia y con la Orden de los Predicadores fundada por Santo Domingo de Guzmán… Respuesta: es que de no ir con el hábito dominico sus declaraciones serían las de una progre como tantas otras, sin brillo ni lustre propio. Razón tuvo una monja que respondió a uno de sus tuits recomendándole “más oración y humildad madre”… apenas cinco palabras, suficientes como para ilustrar la esencia de la “vía contemplativa” que para la Caram parece un mero disfraz.
La proximidad geográfica de la República Argentina a la
República Oriental del Uruguay, permite incluir en el paquete a Ana María Surra, también diputada por
ERC en el Parlamento del Estado. Establecida en España desde 1998, trabajaba
como árbitro de baloncesto hasta que se sumó a la asociación Si, amb Nosaltres, que agrupaba a
extranjeros residentes en España partidarios del independentismo, el consabido
chiringuito al que tan habituados están los nacionalistas y que sigue la misma
pauta: “financiar el independentismo con dinero público”.
Esto es un ejemplo de
lo que nos está llegando de la República Argentina. El riesgo es que puede
hacer que algunos confundan la parte con el todo. De hecho, en España hay
en estos momentos un cuarto de millón de nacidos en Argentina. Muchos tienen ya
la doble nacionalidad. Conozco a muchos que trabajan honestamente y procuran
salir adelante como usted y como yo. Afortunadamente, estos listillos son la
excepción. Se basan en el mismo cálculo: “jugar la carta progre para vivir al calor
de los presupuestos generales del Estado (o tratar de hacerlo)”.
¿Cómo interpretar el fenómeno? Es simple: la izquierda
española está huérfana de ideólogos e, incluso de gente, que se crea el
mensaje. Es un mero pesebre en busca de subvenciones y de subsidios públicos. La
izquierda española necesita rostros y temas nuevos. El fracaso independentista
en atraer a magrebíes y chinos, se compensa con la presencia de unos cuantos
aprovechados arrimados al pesebre nacionalista. Si en España ya no quedan dirigentes
de izquierdas que se crean el mensaje de la izquierda (por otra parte,
desfigurado y convertido en ideología de género y editoriales del Correo de la
UNESCO), los argentinos incorporados a la izquierda española aportan
teatralidad, otro acento y carga emotiva… por rancia que sea y por demodé que
esté. Pero no se engañen, en lo único que creen estos, como los de la izquierda
nacional, es en chiringuitos, pesebres, sueldos públicos, subsidios… Eso es
todo. Alguien, no sin cierta ingenuidad, se ha preguntado cómo es posible que
un grupo de ciudadanos de la República Argentina haya llegado a España y haya
sido acogido por ese mismo Estado al que pretenden todos ellos demoler y cuartear.
Respuesta: porque la izquierda y especialmente el independentismo les ha dado
la ocasión de vivir del cuento.