He aquí tres escenarios que se arriesgan a ser el resultado de la situación actual; el escenario americano, el escenario republicano y el escenario catástrofe:
1º) El deterioro de la situación, una guerra civil endémica con particiones territoriales y creación de poderes políticos islámicos cada vez más fuertes. Ésta es la hipótesis de un retroceso civilizacional mundial, que está en el fondo de la colonización efectiva de Europa.
Retornamos a una especie de nueva Edad Media. Se instaura un mosaico territorial, una "piel de leopardo". Europa se hunde como civilización y deviene una suerte de calidoscopio étnico, con una Unión Europea sin poder y tirado por los hilos americanos e islámicos. Cosmopolis se acuesta en una luz tenue. La sociedad se comunitariza, se ghettiza, deviene multiconfesional, multirracial, multicultural y sobrelleva la dirección de sus propias tensiones, para absorber una criminalidad endémica. Este es el escenario americano. Y finalmente, a pesar de las tensiones, todo ocurre más o menos bien.
Pero ojo: la sociedad americana es una sociedad policial en la cual el número de prisioneros es proporcionalmente casi diez veces superior que en Francia, donde reina de hecho el apartheid racial, donde el sistema penal es muy duro. Sin embargo, una sociedad multirracial, para subsistir, está siempre basado en una represión penal severa. La cultura americana, pionera y pragmática, sin almas ideologizadas, está allí perfectamente preparada. ¿Es éste el caso aquí? Por otra parte, lo que se olvida siempre, sobre todo en Francia donde a los intelectuales no les entra la geografía, se trata éste de un país continental, caracterizada por distancias enormes. En la villa donde vivo -exclusivamente habitada por blancos- las comunidades de otras etnias se hallan distanciadas 500 km, sin ninguna línea de transporte colectiva. Imaginemos que el centro de Lyon estuviese distanciada 500 km de las ciudades de Villeurbanne... Y bien, esto es lo que ocurre. Una política comunitarista allí es posible sin fricciones. Un habitante de Palm Springs tiene allí más o menos como mucho la probabilidad de encontrarse a un negro como un Nantais de cruzar un Checheno en la calle. ¿Es la solución americana realmente exportable a Francia o a Europa?
2º) El crisol multicultural funciona. La sociedad se mezcla, las tensiones étnicas se calman, los jóvenes descendientes de la inmigración se calman, la demografía inmigrante se reabsorbe, un islam a la europea, tolerante y liberal, se basa en las instituciones laicas. Este es el escenario republicano, la posición oficial actual del Estado, que intenta conciliar asimilación y comunitarismo. Esta solución está relacionada con la creencia en los milagros. ¿Por qué un modelo que funciona cada vez peor tendría que dar milagrosamente buenos resultados? Este modelo reposa también sobre una ignorancia profunda de la naturaleza del islam y sobre la creencia de que un día una sociedad multirracial armoniosa será posible. Cítese un sólo ejemplo histórico.
3º) Sucede lo peor. Degenera una dura guerra civil. Todo se derrumba. El futuro está abierto. La brecha en el dique deja al fin pasar las aguas furiosas. Éste es el escenario-catástrofe, o dicho de otro modo el escenario histórico, el único interesante ya que únicamente lo trágico es capaz de suscitar una reconquista y un renacimiento.
Una solución no podrá ser encontrada salvo después de muy graves enfrentamientos; y si, hablando claramente, una guerra étnica desestabiliza Francia (y eventualmente algunos países europeos) al punto de convertirse la situación en insoportable.
Siempre he practicado las matemáticas. Para resolver una ecuación irresoluble, hace falta introducir en él una variable X elevada a la potencia. Las matemáticas son bastante próximas a las ciencias sociales y de la política, salvo cuando excluyen el elemento afectivo como error o indeterminación (-X). En pocas palabras, una catástrofe es siempre positiva porque permite eliminar el subconjunto indeterminado. En historia como en las matemáticas, el elemento afectivo debe se considerado como residual.
(c) Por el texto: Guillaume Faye
(c) Por la Edición Francesa: Editions de l'Aencre
1º) El deterioro de la situación, una guerra civil endémica con particiones territoriales y creación de poderes políticos islámicos cada vez más fuertes. Ésta es la hipótesis de un retroceso civilizacional mundial, que está en el fondo de la colonización efectiva de Europa.
Retornamos a una especie de nueva Edad Media. Se instaura un mosaico territorial, una "piel de leopardo". Europa se hunde como civilización y deviene una suerte de calidoscopio étnico, con una Unión Europea sin poder y tirado por los hilos americanos e islámicos. Cosmopolis se acuesta en una luz tenue. La sociedad se comunitariza, se ghettiza, deviene multiconfesional, multirracial, multicultural y sobrelleva la dirección de sus propias tensiones, para absorber una criminalidad endémica. Este es el escenario americano. Y finalmente, a pesar de las tensiones, todo ocurre más o menos bien.
Pero ojo: la sociedad americana es una sociedad policial en la cual el número de prisioneros es proporcionalmente casi diez veces superior que en Francia, donde reina de hecho el apartheid racial, donde el sistema penal es muy duro. Sin embargo, una sociedad multirracial, para subsistir, está siempre basado en una represión penal severa. La cultura americana, pionera y pragmática, sin almas ideologizadas, está allí perfectamente preparada. ¿Es éste el caso aquí? Por otra parte, lo que se olvida siempre, sobre todo en Francia donde a los intelectuales no les entra la geografía, se trata éste de un país continental, caracterizada por distancias enormes. En la villa donde vivo -exclusivamente habitada por blancos- las comunidades de otras etnias se hallan distanciadas 500 km, sin ninguna línea de transporte colectiva. Imaginemos que el centro de Lyon estuviese distanciada 500 km de las ciudades de Villeurbanne... Y bien, esto es lo que ocurre. Una política comunitarista allí es posible sin fricciones. Un habitante de Palm Springs tiene allí más o menos como mucho la probabilidad de encontrarse a un negro como un Nantais de cruzar un Checheno en la calle. ¿Es la solución americana realmente exportable a Francia o a Europa?
2º) El crisol multicultural funciona. La sociedad se mezcla, las tensiones étnicas se calman, los jóvenes descendientes de la inmigración se calman, la demografía inmigrante se reabsorbe, un islam a la europea, tolerante y liberal, se basa en las instituciones laicas. Este es el escenario republicano, la posición oficial actual del Estado, que intenta conciliar asimilación y comunitarismo. Esta solución está relacionada con la creencia en los milagros. ¿Por qué un modelo que funciona cada vez peor tendría que dar milagrosamente buenos resultados? Este modelo reposa también sobre una ignorancia profunda de la naturaleza del islam y sobre la creencia de que un día una sociedad multirracial armoniosa será posible. Cítese un sólo ejemplo histórico.
3º) Sucede lo peor. Degenera una dura guerra civil. Todo se derrumba. El futuro está abierto. La brecha en el dique deja al fin pasar las aguas furiosas. Éste es el escenario-catástrofe, o dicho de otro modo el escenario histórico, el único interesante ya que únicamente lo trágico es capaz de suscitar una reconquista y un renacimiento.
Una solución no podrá ser encontrada salvo después de muy graves enfrentamientos; y si, hablando claramente, una guerra étnica desestabiliza Francia (y eventualmente algunos países europeos) al punto de convertirse la situación en insoportable.
Siempre he practicado las matemáticas. Para resolver una ecuación irresoluble, hace falta introducir en él una variable X elevada a la potencia. Las matemáticas son bastante próximas a las ciencias sociales y de la política, salvo cuando excluyen el elemento afectivo como error o indeterminación (-X). En pocas palabras, una catástrofe es siempre positiva porque permite eliminar el subconjunto indeterminado. En historia como en las matemáticas, el elemento afectivo debe se considerado como residual.
(c) Por el texto: Guillaume Faye
(c) Por la Edición Francesa: Editions de l'Aencre
(c) Por la traducción castellana: Miguel Ángel Fernández