Querido Diario:
La pasión creadora, la fe puesta en una causa, la firme
voluntad de llegar al final de un desafío, son las características de un cierto
tipo humano que, afortunadamente todavía no ha desaparecido. Hace un
rato estaba mirando un documental sobre el acelerador de partículas del CERN en
Ginebra. El documental abarca desde la puesta en marcha del proyecto hasta la
presentación de un primer informe en julio de 2008. Una comunidad de 4.000
científicos apasionados todos por su trabajo, discutiendo y colaborando físicos
teóricos y físicos experimentales, confrontando la teoría del multiverso con la de la supersimetría, todos ellos entregados a su tarea de investigación, una verdadera aristocracia
científica. En un tema difícil y complicado para los no profesionales de
la materia, pero esta comunidad científica supo transmitir su entusiasmo a los
espectadores del documental. Es lo que tiene creer en lo que se está haciendo.
Y, sin embargo, todos ellos ganan unos sueldos medios aceptables, pero no
excepcionales. Ninguno cobra lo que cualquier político de provincias de tercera
fila. No cobran comisiones, no mienten a la comunidad, no prometen la luna a
los ciudadanos con la facilidad con la que se olvidan de ellos al cerrarse las
urnas, no falsean sus currículos, no se abren paso a codazos, ni conspiran para
estar en los primeros puestos de las listas electorales. Son, simplemente, los
mejores en su especialidad. Es necesario que los pueblos tengan gobiernos, es
preciso que el Estado sea la expresión organizada de la comunidad y que exista
un principio de autoridad y una inteligencia rectora. Pero creo que el drama de nuestro tiempo es
que el terreno de la política –que, a fin de cuentas, es lucha, creación,
destino- ha sido abandonado a los más impresentables, a aquellos cuya única
pasión es el narcisismo en el mejor de los casos y el vivir de sueldos
desmesurados a la sombra del poder. Toda la admiración que siento por
aquellos que experimentan una pasión creadora, por quienes son los mejores, se
transforma en repugnancia hacia una clase política que está demostrando ser el imperio de los
mediocres, el reino de los miserables y
la república de los canallas. Sin ideas, sin más voluntad que la de
lucrarse, aparecer en los medios y gestionar resortes de poder, sin proyecto ni
posibilidades de crear objetivos comunitarios, la corrupción política es el
menor de todos los problemas que tenemos. Que el diablo se los lleve cuanto
antes, a ellos y a los que les dan de comer en la mano.
HARAKIRI DE LOS RESTOS DE
PODEMOS-ICV EN CATALUÑA: 5 DE SUS DIPUTADOS VOTARON A FAVOR DE LA TIETA
FACCIOSA AL FRENTE DEL PARLAMENTO REGIONAL
Por si le faltaba algo para que la franquicia catalana de
Podemos aportara su granito de arena
al declive de la formación, cinco de sus diputados votaron a favor de la
investidura de Carmen Forcadell como presidenta del Parlament de Catalunya.
Que no es la persona más adecuada, lo saben hasta los necios: una institución que debe de
estar presidida por alguien que haga gala de una serena neutralidad política,
está en manos de una facciosa tontorrona, sin experiencia política de ningún
tipo que cree que la institución es una prolongación de la Asamblea Nacional de
Catalunya. La tieta es un
producto de la “era Mas”, ese período en el que Cataluña quedó partida en dos.
Por supuesto, La Vanguardia no da los
nombres de los cinco diputados de Catalunya
SI que es pot que votaron a favor de la Forcadell. Tengo familia en ICV y amigos en Podemos.cat, los suficientes como para
saber que todos ellos no están a favor del soberanismo y, desde luego,
abominan, sino les da náuseas, apoyar a la candidata del partido de la
corrupción. Es más, todos ellos, alguno líder histórico del PSUC y de
ICV, son antisoberanistas.
Por otra parte, los votos que le han llegado a esta coalición,
mayoritariamente, proceden del sector de la izquierda que considera que la
lucha de clases y la lucha de los oprimidos no tienen nada que ver con las
reivindicaciones nacionalistas generadas siempre por una burguesía que aspira a
la hegemonía política. De ahí el jacobinismo tradicional de las izquierdas. Sin
embargo, en Cataluña, ya desde los tiempos de Comorera y de la República, la
izquierda ha sido víctima de una trampa (o de una traición de sus dirigentes).
El razonamiento que utilizan es: “el
independentismo es “popular”, luego no nos podemos oponer a las legítimas
aspiraciones del pueblo catalán”… olvidando que el soberanismo, históricamente, no ha sido
nada más que el recurso emotivo y sentimental utilizado por la burguesía
catalana para justificar su opción. Ha sido esa burguesía la que ha creado
artificialmente “la necesidad” de soberanismo, recurriendo sin sonrojarse a la
falsificación histórica consciente. No es que tal soberanismo haya
nacido del seno del pueblo, sino –como se ha podido ver claramente desde el
principio de la era Mas- que lo ha hecho de campañas de propaganda que
generarían envidia del mismísimo Stalin, financiadas con cargo a los
presupuestos catalanes. Esta
votación supone el hara-kiri en
doblete, tanto de ICV como de la franquicia catalana de Podemos. No lloraremos por aquellos que desaparecen con
vergüenza y deshonor, con estupidez y bobaliconería.
¿QUÉ LA OMS DENUNCIA LA CARNE
PROCESADA? ¡UN NUEVO ATENTADO CONTRA LA IDENTIDAD EUROPEA EN BENEFICIO DEL MULTICULTURALISMO!
Vamos a disipar un equívoco: las organizaciones
internacionales que surgieron después de la Segunda Guerra Mundial no son, como
se tiene tendencia a pensar, foros de naciones en las que todas participan de
manera igualitaria: son sectas, repito, sectas, de funcionarios provistos de
una ideología “humanista y universalista”. De esta secta bebió ZP su
doctrina y allí están las fuentes ideológicas de la New Age. Los países aportan representantes y fondos, pero quien
controla la ONU, la UNESCO, la OMS, la FAO, etc, es una secta funcionarial que
se reproduce a sí misma. Esto explica el porqué la UNESCO tiene como obsesiones, por ejemplo, el aborto,
la eutanasia, las reivindicaciones de gays, lesbianas, el feminismo, el
multiculturalismo, el “mestizaje culturas” y demás lindezas a las que solamente
se presta atención en Europa. Las propuestas en todos estos frentes
nacen de los laboratorios ideológicos de estas organizaciones y se transmiten a
la sociedad mediante ONGs subvencionadas con dinero entregado por los Estados
para el mantenimiento de los organismos internacionales. Es así como luego
llegan a ser recogidas por los partidos políticos nacionales, ávidos de
incorporar temas de ingeniería social. Ahora le ha tocado a la OMS quedar en
evidencia con su informe
sobre la “carne procesada” que apunta ESPECIALMENTE contra los hábitos
alimentarios tradicionales en Europa: olvidando que algo que se ha
comido siempre no puede ser malo porque, de serlo, su nocividad habría sido ya
advertida por generaciones y generaciones anteriores, la OMS condena los
embutidos, las carnes, las salchichas, y así sucesivamente. En 2000, la ONU
emitió un “sesudo informe” en el que sostenía con una seriedad pasmosa que
Europa necesitaba 40 millones de inmigrantes en los veinte años siguientes.
Demasiado para ser cierto. ¿Cuál
es el proyecto de todas estas asociaciones internacionales? UN GOBIERNO
MUNDIAL, UNA RELIGIÓN MUNDIAL, UNA SOLA RAZA, UNA UNIFICACIÓN MUNDIAL, UN
MESTIZAJE GENERALIZADO Y DESAPARICIÓN DE TODO TIPO DE IDENTIDADES NACIONALES…
ESPECIALMENTE DE LA IDENTIDAD EUROPEA. Por eso se critica la
alimentación a base de salchichas y embutidos, por eso se muestran hostiles al
vino. Somos lo que comemos: esa es nuestra identidad. El informe no dice, por
supuesto, nada sobre los Kebab, ni
sobre la carne de cordero, y evita pronunciarse sobre carnes de pollo
hormonadas o fast-foods de calidades
deleznables, no dice tampoco nada de los riesgos de dietas a base de harinas,
ni de los riesgos de comer frutas y verduras cultivadas con sobredosis de
pesticidas, vermicidas, fungicidas y abonos químicos, tampoco dice nada sobre
los transgénicos… solamente apunta contra el estilo europeo de comida. En 1945 se crearon todas estas
organizaciones internacionales. Algunos ya entonces, señalaron que estas
organizaciones recortaban la soberanía nacional. Al final ha resultado que,
además de situarse por encima de nuestros Estados –expresiones organizadas de
la comunidad nacional- también apuntan contra la identidad europea… ¿por qué
contra la identidad europea? Simplemente porque es la mejor definida y el
obstáculo más duro contra la globalización.
PRISA EN RUINAS. EL PAIS, ESE
RESIDUO DE LA TRANSICIÓN, DEBERÍA DE HABER CERRADO SI SE RIGIERA POR CRITERIOS
EMPRESARIALES.
En 1977 existían grupos
económicos y mediáticos e intereses internacionales que impulsaron la transición.
La mayoría de estos grupos están desaparecidos en combate (Cadena16), en crisis
(Grupo Zeta) o en desguace por partes (Cadena PRISA). En cuanto a los grupos
económicos hoy tienen una estructura muy diferente a la que tenían en 1975-78
y, finalmente, en lo que se refiere a los grupos internacionales ocurre otro
tanto: dicho de otra manera, los consensos que existieron entonces ya no son
posibles de mantener en la actualidad. Por eso –y por la crisis de senectud- la Constitución de 1978 está
muerta y enterrada. De todos estos cambios el que ha afectado a la
prensa española es, sin duda, de los más significativos. Especialmente en lo
que se refiere al Grupo PRISA que ya empezó a encontrar las primeras
dificultades con el advenimiento del milenio y con la progresiva transformación
de la era macluhan en era digital. El
País llegó tarde a la transformación y nunca ha figurado entre las webs más
visitadas ni más influyentes. El drama consiste en que las últimas cifras del diario emblemático de
la transición registran pérdidas de 12,8 millones de euros y un descenso en
ventas del 15%, en bruto 38.900 lectores perdidos en un año. El periódico que
estuvo próximo al millón de ejemplares de tirada a mediados de los 90, está hoy
reducido apenas a una tirada de 225.520 ejemplares, de los que
probablemente se venda la mitad. En conjunto, PRISA vio reducidos sus ingreso
un 9’2% en sólo un año. Como el que no se consuela es porque no quiere, la
editorial ha emitido una nota en la que declaraba que las pérdidas se han
reducido a la mitad en ese tiempo… o que han aumentado los ingresos por
publicidad (¿cómo pueden aumentar si la circulación es menor? Fácil: porque los
anunciantes no intentan vender mediante esa publicidad, sino apuntalar al
diario. Juan Luis Cebrián, actual dirigente del grupo PRISA alardea de que se
ha reducido la deuda bancaria en 702 millones… pero este dato adquiere su
verdadera dimensión solamente cuando se sabe que quedan todavía 1.880 millones de deuda y que la reducción
se realizó vendiendo Digital+ a Telefónica y deshaciéndose de las acciones que
el grupo tenía en Mediaset… PRISA, además, puede consolarse afirmando
que la crisis de los medios convencionales es general. Pero habría que añadir
que, siendo general, la de PRISA es de las mayores.
PARACUELLOS: TODO SIGUE APUNTANDO CONTRA SANTIAGO CARRILLO.
ENCUADRAR PARACUELLOS DENTRO DE LA PRÁCTICA BOLCHEVIQUE: ESO SI QUE ES MEMORIA
HISTÓRICA
En 1939 se rodó en Italia la película Carmen tra i rossi, proyectada en España
con el nombre de Frente de Madrid. El director era Edgar Neville, falangista y
uno de los grandes olvidados del cine español. Allí se unió a Conchita Montes (“Carmen”), una de las mujeres más
espectaculares e inteligentes de la postguerra española. En esa película Edgar Neville, en las escenas finales,
llama a la reconciliación entre españoles, a través del diálogo entre un
falangista y un anarcosindicalista heridos de muerte que terminan encontrándose
en la tierra de nadie. Era 1939. Neville volvió a reiterar este tema de la “reconciliación” en su
película Mi calle quince años después.
Pero la izquierda no
asumió el llamamiento porque a fin de cuentas, lo que le molestaba era haber
perdido la guerra y el que existiera una Causa General en la que se les
recordaba sus asesinatos y tropelías. Claro, también hubo en el bando
franquista (hasta Himmler
recomendó a Franco en 1941 que disminuyera la represión contra los vencidos…)
salvajadas y abusos. De ahí la necesidad de “reconciliación”. Todo esto viene a
cuento de Santiago
Carrillo. Su problema no fue el de ser solamente el verdugo de
Paracuellos. Era
socialista y trabajó para Moscú en un momento en el que la práctica soviética
consistía en liquidar a la oposición irreductible. Todos aquellos que se habían
significado, más o menos, en los partidos de derechas durante la república,
especialmente con responsabilidades de mando, se consideraba que eran
irreductibles al Frente Popular y, por tanto, debían ser asesinados o de lo
contrario, de ellos podrían partir nuevas acciones opositoras. La
historia del bolchevismo está repleta de casos de estos (del que, las fosas de
Katyn es doblemente significativo por el número y la sistematización de los
asesinatos y porque en Nuremberg fueron atribuidos al Tercer Reich…), así que
no hay que sorprenderse. La sorpresa viene porque a lo largo de su dilatada vida, Santiago Carrillo no dejó
a nadie sin traicionar. Lo hizo con su padre, lo hizo con Líster y sus
camaradas, lo hizo con los anarcosinficalistas, lo hizo con diferentes
direcciones del PCE, lo hizo con el maquía, lo hizo con Julián Grimau al que
envió “marcado” a España para poder contar con un “mártir”, lo hizo con sus
camaradas durante la transición rindiendo pleitesía al Consejo de Relaciones
Exteriores de los EEUU en 1978 e iniciando al regreso la voladura controlada
del PCE, lo hizo con los que le acompañaron al PSOE. Una vida que hizo de la
traición una constante. Una
vida nauseabunda. No es raro que en la transición su figura fuera enaltecida y
sus crímenes olvidados: aquellas aguas, aquel relativismo moral, han traído
desde entonces los lodos por los que se ha arrastrado la constitución.
La “reconciliación” hubiera implicado el que Carrillo nunca más hubiera
regresado a España. La transición lo trajo aquí como vedette…