martes, 5 de marzo de 2019

365 QUEJÍOS (285) - ¡PERO QUE NOS HA LLEGADO DE ARGENTINA!


Vaya por delante una sincera afirmación de amistad fraterna, solidaridad e hispanismo con la República Argentina. Lo saben bien los amigos argentinos y pueden intuirlo todos los que conocen la historia de nuestro país y saben que hubo un tiempo en que éramos uno. En la segunda mitad del siglo XX, Argentina ha tenido mala suerte y, de tener lugares que podían rivalizar con París y Nueva York, fue perdiendo posiciones hasta llegar al siglo XXI, inaugurado con “el corralito”, en donde parece claro que Argentina no ha tenido los gobiernos que se merece, sino más bien una plaga de oportunistas sin escrúpulos que la han saqueado y sumido en una sima de la que el país pugna por salir.

En los años 70, empezaron a llegar en distintas oleadas otros exiliados que, inevitablemente, cuando se les preguntaba algo te decían: “estuve con los montos… me picanearon”. Eran -o decían ser- “montoneros” o, genéricamente “guerrilleros”. La mayor parte, eran unos cantamañanas que aprendieron pronto que, en aquellos años en los que, en España, ser de izquierdas era casi una obligación, así que se presentaron como homólogos “picaneados”. De creer en su militancia, los montoneros debieron tener cerca de 100.000 activistas.... Pocos años después, la opinión pública española, había variado extraordinariamente su percepción sobre “los argentinos”. El actor bonaerense Federico Luppi que pasó por España en esos años, comentó que cuando le alquilaron un piso en Madrid se sorprendió de que no le pidieran más que a otro español para formalizar el contrato: “Señora -dijo a la casera- que soy argentino…”. Hasta ese punto había llegado la mala fama de la diáspora argentina en aquella época.

Tras el secuestro y cobro del rescate al multimillonario Jorge Born por los montoneros, una parte de la dirección animó a sus militantes en el exilio a volver al interior del país para “reemprender la lucha”. Todos fueron detenidos en la frontera. Los miembros de la dirección -que la lógica dice que estaban en el secreto de las delaciones- se repartieron el dinero de los Born. Fidel Castro se quedó una parte y otra fue devuelta años después a la familia Born. Una parte quedó en manos de Mario Firmenich, el máximo dirigente montonero, que terminó estudiando económicas en España y residiendo en Cataluña (ahora mismo, en Vilanova i la Geltrú) en donde hoy sigue.

Cuando llegamos al siglo XXI, Argentina sufrió el famoso “corralito” y el número de exiliados económicos se multiplicó. En ese momento, empezaron a llegar a cascoporro individuos que, sin tener absolutamente ninguna convicción política, sino un deseo de sobrevivir, se fueron alineando a la izquierda (que siempre se ha mostrado mucho más enternecida por los “exiliados económicos” que la derecha). Parecía como si Argentina expidiera en dirección a la Madre Patria a personajes de tercera o cuarta fila que, sin tener preparación política, ni siquiera bagaje cultural suficiente, se apalancaron en partidos de izquierda, buscando, a falta de principios ideológicos sólidos, un simple acomodo a la sombra del poder. Los conocemos todos, las opiniones de algunas son excéntricas e ignorantes hasta lo grotesco.


Pablo Echenique, por ejemplo, antes de ser secretario de organización de Podemos, había militado en Ciudadanos… partido diametralmente opuesto. Hombre que pregona una sociedad más justa, no debió creer que su asistenta personal merecería disfrutar de los derechos laborales reconocidos en España y que le valió la reprobación del pleno del ayuntamiento de Zaragoza, ciudad de la que era concejal. Habitualmente, los tuits de este pobre hombre son un canto reiterativo a los tópicos progresistas que, para colmo, reflejan su absoluto, total y palmario desconocimiento sobre la historia de España… y sobre la lógica aristotélica.

Por algún motivo que se nos escapa, pero que, desde luego, no tiene nada que ver con ideas políticas, varios de estos elementos han participado en el “proceso” independentista catalán. Tal el caso de Gerardo Pisarello, hijo del dirigente radical argentino Ángel Pisarello desaparecido durante el régimen militar, seguramente por haberse caracterizado en la defensa de numerosos montoneros y troskystas del ERP en la zona de Tucumán. Primer teniente de alcalde de la ciudad de Barcelona, y concejal por “Catalunya en Comú”, el partido dirigido por la Colau, de cuya ejecutiva es miembro. En su biografía aparece como “impulsor del Procés Constituent”. Sería mucho decir que la responsabilidad de la degradación de Barcelona en los años en los que Pisarello ha sido teniente de alcalde, se deben solamente a él, pero sí que es cierto que la orientación pro-independentista de una parte de “Catalunya en Comú” es su responsabilidad. Fundador del chiringuito DESC (Observatorio de los Derechos, Económicos, Sociales y Culturales), en el que participa también la Colau y que es uno de los principales receptores de fondos municipales: 150.000 en 2015, 254.777 en 2016, 267.016 en 2017 y sigue en aumento. Pisarello también ha sido el que ha desviado fondos municipales a DiomCop, la “cooperativa de manteros”: ¡450.000 euros solamente en 2017!

Si Pisarello tiene el título de Derecho, su paisano Albano Dante Fachín, también “miembro del proceso constituyente de Cataluña”, muestra un curriculum en Internet ambiguo en relación a sus estudios: “abandonó la carrera sin acabarla para iniciar el proyecto Cafeambllet”… ¿Qué es ese proyecto? No “es”, fue una simple hoja de publicidad gratuita que resultó multada en alguna ocasión por los tribunales por “atentar contra el honor” de personas relacionadas con la sanidad (repetía chascarrillos de pueblo nacidos en el entorno del Hospital comarcal de Blanes). La revista se repartía en Blanes y La Selva. Fachín suele elogiar el trabajo que realizó en esta hojita diciendo que ha desvelado “escándalos en la sanidad de Blanes”, pero lo cierto es que la revista se mantuvo gracias a las subvenciones: entre 2009 y 2011 recibió ayudas de casi 30.000 euros. Sin olvidar que, en la Cataluña nacionalista, allí donde se rasca sale algún pufo. El último número se publicó en julio de 2015. En 2018, fue fichado como tertuliano del RAC1, pasando de criticar al “Grupo Godó” a colaborar con él. Se apuntó a Podemos sin renunciar al “proceso soberanista”. Fue elegido diputado del parlamento de Cataluña en 2015, siendo luego nombrado secretario general de Podemos en Cataluña… organización a la que dejó en la estacada pensando que el “proceso” seguía siendo un negocio con más futuro y con un mejor pesebre en la región. En octubre de 2018 entró en el “Consejo Asesor para el Impulso del Foro Cívico y Social para el Debate Constituyente”, otra de los organismos pesebristas creados para “petarse presupuesto” de la gencat y ofrecer unos recursos razonables a sus promotores… Este es el que, dando muestras de su nivelazo intelectual, cuando el juez le preguntó su profesión, tras dudarlo, no mencionó, ni el Caféconleche, ni su trabajo como tertuliano del RAC, sino que optó por presentarse como “parado”, eludiendo la utilización de la expresión y diciendo: “he trabajado en la obra… como camarero… y precario”. No estuvo, desde luego, en su momento más inspirado. El cálculo de Fachín es que, echar una mano a los procesados puede venirle bien en el futuro… si de lo que se trata es de vivir del pesebrismo.


Finalmente, esta muestra de personajes pintorescos y tristes arribistas llegados de la República Argentina, se completa con Lucía Caram Padilla, más conocida como “sor Lucía Caram”. Oriunda de Tucumán y de antecedentes libaneses, dice en su biografía que “fue duramente castigada por la represión militar”, sin mayor especificación. Vive desde hace 27 años en España y reside en el Convento de Santa Clara de Manresa. Desde allí “promueve el diálogo interreligioso” (participó en el II Parlamento Catalán de las Religiones.) e impulsa la “Fundación Rosa Oriol que atiende a 1400 familias desfavorecidas”. Hay que decir que Rosa Oriol es la joyera de la firma Tous. ¿Las aficiones de la monja? “se manifiesta contra la corrupción, a favor de los más pobres, a favor de los políticos presos en Cataluña, y a favor de la independencia de Cataluña. Además, ha hecho declaraciones a favor de los homosexuales y sobre su posibilidad abierta de incorporarlos dentro del matrimonio convencional, así como a favor de la acogida de inmigrantes y refugiados en España”, dice estar “contra la sociedad machista y patriarcal” y sostiene que la Iglesia “debe renovarse para afrontar el aborto y los métodos anconceptivos”. Vamos, el paradigma completo del “progre”. Y además, anda entre pucheros para el Canal Cocina. A la vista de este historial, uno se pregunta qué tiene que ver todo esto con la Iglesia y con la Orden de los Predicadores fundada por Santo Domingo de Guzmán… Respuesta: es que de no ir con el hábito dominico sus declaraciones serían las de una progre como tantas otras, sin brillo ni lustre propio. Razón tuvo una monja que respondió a uno de sus tuits recomendándole “más oración y humildad madre”… apenas cinco palabras, suficientes como para ilustrar la esencia de la “vía contemplativa” que para la Caram parece un mero disfraz.

La proximidad geográfica de la República Argentina a la República Oriental del Uruguay, permite incluir en el paquete a Ana María Surra, también diputada por ERC en el Parlamento del Estado. Establecida en España desde 1998, trabajaba como árbitro de baloncesto hasta que se sumó a la asociación Si, amb Nosaltres, que agrupaba a extranjeros residentes en España partidarios del independentismo, el consabido chiringuito al que tan habituados están los nacionalistas y que sigue la misma pauta: “financiar el independentismo con dinero público”.

Esto es un ejemplo de lo que nos está llegando de la República Argentina. El riesgo es que puede hacer que algunos confundan la parte con el todo. De hecho, en España hay en estos momentos un cuarto de millón de nacidos en Argentina. Muchos tienen ya la doble nacionalidad. Conozco a muchos que trabajan honestamente y procuran salir adelante como usted y como yo. Afortunadamente, estos listillos son la excepción. Se basan en el mismo cálculo: “jugar la carta progre para vivir al calor de los presupuestos generales del Estado (o tratar de hacerlo)”.

¿Cómo interpretar el fenómeno? Es simple: la izquierda española está huérfana de ideólogos e, incluso de gente, que se crea el mensaje. Es un mero pesebre en busca de subvenciones y de subsidios públicos. La izquierda española necesita rostros y temas nuevos. El fracaso independentista en atraer a magrebíes y chinos, se compensa con la presencia de unos cuantos aprovechados arrimados al pesebre nacionalista. Si en España ya no quedan dirigentes de izquierdas que se crean el mensaje de la izquierda (por otra parte, desfigurado y convertido en ideología de género y editoriales del Correo de la UNESCO), los argentinos incorporados a la izquierda española aportan teatralidad, otro acento y carga emotiva… por rancia que sea y por demodé que esté. Pero no se engañen, en lo único que creen estos, como los de la izquierda nacional, es en chiringuitos, pesebres, sueldos públicos, subsidios… Eso es todo. Alguien, no sin cierta ingenuidad, se ha preguntado cómo es posible que un grupo de ciudadanos de la República Argentina haya llegado a España y haya sido acogido por ese mismo Estado al que pretenden todos ellos demoler y cuartear. Respuesta: porque la izquierda y especialmente el independentismo les ha dado la ocasión de vivir del cuento.