Estoy harto de ir por las calles de las grandes ciudades y
que bandadas de gente joven me asalte preguntándome si conozco la epidemia de
tifus de Senegal o la mala suerte de los niños albinos en el continente
africano. Es triste. En realidad, es doblemente triste que haya gente joven que
se vea obligada a asumir trabajos miserables a comisión y que existan ONGs que
los contraten para practicar lo que, en rigor, no es más que “la estafa
humanitaria”. Esa estafa está en todas
partes: vas a un cajero automático y te sugieren que des 5 euros “por el hambre
en las Galápagos”. Pasas por delante de una tele y cualquier canal promociona
alguna “iniciativa solidaria”. Incluso están en el retrete leyendo el Diez
minutos en posición de defequen y rara es la página que no menciona a alguna
ONG. Cada famoso tiene, al parecer, alguna preferida. ME QUEJO DE TODO ESO:
NUNCA COMO HOY HA EXISTIDO TANTO “SOLIDARIO” Y NUNCA COMO HOY TANTO
IMPRESENTABLE HA VIVIDO DEL CUENTO.
No quisiera generalizar: supongo que habrá gente que
realmente se muestra solidario con sus semejantes. E incluso, hasta es posible –posible,
no probable- que exista alguna ONG que haga bien sus deberes y que no se gaste
en sí misma más de lo que ingresa justificando ayudas para una causa justa.
Hace tiempo que dejé de creer en Papá Nöel. De hecho, no creo siquiera en el
CIS. Creo que era Proudhom quién decía: “Cuando alguien dice ‘humanidad’,
atención, pretende engañar”. Parafraseando podría decirse: “Cuando alguien dice
‘solidaridad’, cuidado, pretende vivir del cuento”. Y a todos los niveles.
Créanme: no tengo inconveniente en que me despiecen al morir
y que una córnea vaya a parar (dioptrías incluidas) a un ciego, que mis riñones
acaben en dos necesitados antes que en la barbacoa del crematorio, mío hígado
podría permitir a alguien beberse varios litros de cerveza. De hecho, ahora
mismo, soy donante de sangre… Y NO SOY EN ABSOLUTO ‘SOLIDARIO’. Una vez muerto,
poco me importa que me troceen. Y en cuanto a mi sangre, créanme, es bueno
donarla: así la renuevas. ¿Que beneficia a otros? Mejor que mejor.
Lo más odioso de las ONGs, no es que reciban generosísimos
subsidios A CAMBIO DE NADA, ni siquiera que NO EXISTA ABSOLUTAMENTE NINGÚN
CONTROL SOBRE SUS GASTOS. Lo más odioso no es que, la primera partida de gastos
de las ONGs sea “en publicidad” y en “sueldos” para sus propios miembros. Lo
más bochornoso no es que la mayoría de ONGs no sirvan absolutamente para nada,
que otras sean instrumentos de servicios de inteligencia, que la mayor parte
sean recursos de espabilados para realizar el “Spanish dream” (trabajar poco – ganar mucho), ni siquiera que los
medios de comunicación las ensalcen y jaleen. LO MÁS BOCHORNOSO ES QUE TODOS
SABEMOS QUE LA INMENSA MAYORÍA PRACTICA LA ESTAFA HUMANITARIA CON UN CINISMO DEL QUE NO SE ATREVERÍA A HACER GALA LA PEOR
PURRIA EXISTENTE BAJO EL CIELO ESPAÑOL: CAPAZ DE TRANSFORMAR EL SUFRIMIENTO DE
OTROS, LA BUENA FE DE LOS INGENUOS Y EL DESINTERÉS DEL ESTADO, EN LUCRO PROPIO.
De eso si que me quejo… Me quejo de que, sin que medien
investigaciones de la fiscalía, sin que el rumor a gritos sobre las malas
prácticas de las ONGs (alguna que ha recibido más de un millón de euros ni
tiene socios, ni realiza actividades, pero la pareja responsable cada vez está
más oronda), cuando estamos asistiendo diariamente a una corrupción con sordina…
de tanto en tanto aparezcan noticias sobre abusos sexuales en una ONG famosa,
escándalos sobre malversaciones de fondos en otras dedicadas a “apadrinar niños”…
Y a ninguna instancia del gobierno (ni de la oposición) parezca interesarle
nada en absoluto.
Digámoslo ya: LAS SUBVENCIONES QUE SE ENTREGAN A LAS ONGs,
ESTÁN FUERA DE CONTRAL Y UNA PARTE VUELVE AL BOLSILLO DE QUIEN HA FIRMADO EL
ENVÍO DE FONDOS. Esto pasa con las subvenciones entregadas por el Estado, por
las Comunidades Autónomas y por los Ayuntamientos. ¿Entendéis ahora porqué hay
tanto interés en entregar el 0’7% en concepto de “ayudas al desarrollo” y
porqué ningún organismo de la fiscalía se preocupa por investigar las cuentas
de las ONGs? ¿Entendéis ahora cómo se pagan partidos políticos y porque
políticos con sueldos altos pueden costearse gastos más altos aún? ¿O es que creíais
que solamente viven de su sueldo y del 3% de comisión sobre obra pública?
Y eso, no lo olvides, se hace con tu dinero y con el mío. Al
menos, las antiguas mesas de caridad presididas por marquesonas, ellas mismas
se pagaban la autopromoción, haciendo méritos para ganar un parcela en el cielo.
Así pues, si os preguntan: “¿estáis interesados en cuestiones humanitarias?”,
responded: “Sí, ¿para cuándo se disuelven las ONGs?”. PORQUE DE LO QUE ME QUEJO
ES DE QUE, NUNCA COMO HOY, LA SOLUCIÓN A LOS “PROBLEMAS HUMANITARIOS” HA ESTADO
TAN LEJOS DE LAS ONGs.