Las ideas de este artículo son cinco:
1) Las noticias falsas sobre “brutalidades rusas” han comenzado a multiplicarse en los canales de televisión y en redes sociales (hemos pillado una de ellas),
2) La única guerra que la OTAN está en condiciones de emprender es la “guerra psicológica”.
3) Las sanciones económicas impuestas por la UE son limitadas en intensidad y en el tiempo y son la prolongación de las que ya estaban en vigor desde hace ocho años
4) Rusia, mediante las criptomonedas, puede eludir cualquiera de las sanciones económicas impuestas y
5) La OTAN ha demostrado ser una “alianza militar” incapaz de ofrecer “seguridad militar” a quien invita a ingresar en el club. Un toque de atención para los estados miembros.
Veamos cada una de ellas con cierto detenimiento
1) NOTICIAS FALSAS PILLADS IN FRAGANTI
Los sucesos de Ucrania son lo suficientemente dramáticos como para
que no haga falta exagerar. Está muriendo gente. Y no desde ayer, sino desde
hace ocho años, cuando Ucrania, espoleada por “Occidente” (esto es por la OTAN,
es decir, por el “imperio” y sus “vasallos” europeos) decidió que quería seguir
gobernando en regiones que jamás habían sido ucranias y que solamente estaban
incorporadas a esa república de la URSS desde lo más tenebroso del estalinismo.
Esto viene a cuento de que hoy, los espectadores de Antena 3 y de otros
canales se han despertado con imágenes escalofriantes de lo que, según nos
contaban, era el “ataque ruso a Ucrania”. Y, en efecto, las imágenes eran
espectaculares: la explosión parecía casi una bomba nuclear. Lamentablemente,
eran imágenes que no corresponden al conflicto ucraniano, sino a la explosión ocurrida
en 2015 en una fábrica en Tianjin, China…
He estado buscando en Internet y, efectivamente, no era yo solo
quien tenía esas imágenes en la retina, sino que otros internautas -y algunos
grupos de “verificación” de noticias- también lo han advertido. Este vídeo de
youtube (en inglés, pero cuyo texto viene traducido al castellano) da cuenta de
las imágenes a las que aludimos y de dónde proceden: https://www.youtube.com/watch?v=KoaBZms_KQo
¿Qué se pretende con estas imágenes? Está claro que demostrar la “brutalidad”
del ataque ruso. Hay que recordar que, en los informativos, estas imágenes -y
seguramente otras muchas tan falsas como estas- han acompañado a otras con
mujeres llorando, caravanas de personas aterrorizadas huyendo de los combates
(presuntos o reales), etc. En su conjunto, el informativo tiende a sensibilizar
a la opinión pública sobre un ataque “brutal” contra una población “indefensa”…
Ahora bien, si quitamos la imagen de la explosión de Tianjin, veremos que todo
se reduce a una dimensión mucho más reducida. A algún corresponsal de las
cadenas nacionales, cuando, desde Madrid se le ha preguntado, si estaba “oyendo
las explosiones de bombas en la capital ucraniana”, daban respuestas embarazosas:
“No, desde donde estoy no oigo explosiones… pero seguramente en el otro
extremo de la ciudad se han producido”…
2) LA ÚNICA GUERRA EN CONDICIONES DE ASUMIR LA OTAN: “GUERRA
PSICOLÓGICA”
Técnicamente, a esto se le llaman “operaciones psicológicas”. Un
departamento dedicado a estas actividades está integrado en los Estados Mayores
de todo el mundo (habitualmente, en su “sección séptima”). Su trabajo, en
principio, consiste en trasladar informaciones de ámbito militar a la opinión
pública… pero, claro está, que la función real consiste en adaptar a la opinión
pública para que reaccione tal como lo exige una situación política concreta.
Recordemos el asunto de las “armas de destrucción masiva” que precedieron a la invasión
norteamericana en Iraq: pero durante varios meses, el bombardeo sobre el tema
era continuo, hasta el punto de que la sorpresa vino, cuando destruido el
régimen de Saddam Hussein, esas armas no aparecieron. Todo había sido una “operación
psicológica” para predisponer a la opinión pública de “Occidente” a que
aceptara la inevitabilidad de la invasión que había decidido el complejo
militar-petrolero-industrial de los EEUU. Desde entonces, nada ha cambiado, o,
mejor dicho, hoy las “operaciones psicológicas” cuentan con más medios.
Recomiendo ver la película Cortina de Humo (protagonizada por Robert de Niro y Dustin Hoffman) filmada en
1997, donde se presenta el método para generar de la nada un problema y,
además, convertir a patanes en héroes y allí donde no ha ocurrido nada situar
una guerra. La película puede ser “bajada” a través de eMule, o si se prefiere
de los Torrents en https://rojotorrent.com/pelicula/6395/La-cortina-de-humo
No es nada nuevo especialmente si tenemos en cuenta que semanas
antes de que estallara la “guerra hispano-norteamericana” de 1898, los diarios
de la cadena Hearst difundían sistemáticamente informaciones absolutamente
falsas sobre las presuntas “brutalidades” cometidas por el ejército colonial
español en Cuba. No solo eso, pocos días antes de la explosión del acorazado
Maine en la rada de La Habana, el propio yate de Randolph Hearst ¡había estado
atracado junto al acorazado que volaría unos días después! Sin olvidar el “incidente
de Tonkin” que dio el pistoletazo de salida a la guerra del Vietnam y que jamás
existió (salvo para los medios de información). Por no hablar, claro está, del “incidente
Gleiwitz” que tampoco existió y que se construyó muy a posteriori para
justificar la entrada de Francia e Inglaterra en la Segunda Guerra Mundial.
Hoy, las “operaciones psicológicas” son más necesarias que nunca
para la OTAN. Examinad lo que ha ocurrido y lo que no cuentan los medios.
El conflicto se inicia cuando la OTAN presiona a Ucrania para
integrarse en la alianza. Ucrania está de acuerdo, porque, además, le proponen
ingresar también en la UE, lo que significa, dinero: fondos para seguir
alimentando a su oligarquía. No es raro que el
gobierno ucraniano mirara con esperanza esta posibilidad: sabía que la UE ha
donado fondos ingentes a países como España o Grecia, que se han perdido por
los senderos de la corrupción ¡y no ha pasado nada! Así que el atractivo del
paquete OTAN-UE era enorme para la oligarquía.
Pero, claro, el problema era Rusia. Era evidente que se tomarían
mal la instalación de misiles de la OTAN en la frontera ruso-ucraniana. Así
pues, había que obtener “garantías” de que, en caso de que la tensión
aumentara, la OTAN respondería como se espera de un aliado: respondiendo a la agresión
con las armas… A fin de cuentas, la OTAN es una “alianza militar”.
Pero no, la respuesta de “Occidente” han sido únicamente “sanciones
económicas”. No ha existido respuesta militar, solo “económica”, lo que, por
cierto, no es la mejor garantía de credibilidad para una “alianza militar”.
3) LAS SANCIONES ECONÓMICAS, UNA VIEJA HISTORIA
Los medios de comunicación insisten en la “importancia” de estas
sanciones. Me he tomado la molestia de recurrir a una página oficial de la UE
en donde se detalla la naturaleza de estas sanciones. Este es el enlace: https://www.consilium.europa.eu/es/press/press-releases/2022/02/21/ukraine-s-territorial-integrity-eu-targets-five-more-individuals-with-restrictive-measures/
Han sancionado a todos y cada uno de los diputados de la Duma que
votaron a favor del reconocimiento de las Repúblicas de Lugansk y del Donnest.
Y también a los cinco diputados enviados por Crimea, cuya integración en Rusia (Crimea siempre ha sido rusa, salvo en los años del estalinismo),
la UE “no reconoce”. Y luego están las sanciones más directamente
económicas. En la web de la UE puede leerse:
“Las medidas restrictivas relativas a acciones que socavan o
amenazan la integridad territorial, la soberanía y la independencia de Ucrania
se introdujeron por primera vez el 17 de marzo de 2014. Desde entonces, se han
ampliado periódicamente. La última prórroga cubre el período hasta el 15 de
marzo de 2022. Otras medidas de la UE implementadas en respuesta a la crisis en
Ucrania incluyen sanciones económicas dirigidas a sectores específicos de la
economía rusa, actualmente vigentes hasta el 31 de julio de 2022 y medidas
restrictivas en respuesta a la anexión ilegal de Crimea y Sebastopol, limitadas
al territorio de Crimea y Sebastopol y actualmente en vigor hasta el 23 de
junio de 2022”.
Así pues, la mayoría de sanciones no son nuevas: estaban ya
vigentes desde mazo de 2014. Y las que se imponen ahora estarán vigentes
hasta el 31 de julio de este año, y las que aluden a Crimea hasta el mes de junio…
Esto me recuerda al chiste aquel de “Me han dado una paliza” y el otro
le dice, “pero ¿te has vengao?”. “Hombre, es que, si no me vengo, me matan”.
La “venganza” de la UE han sido estas “sanciones económicas”, certificando así
su impotencia y su seguidismo hacia la política del títere arteriosclerótico
que gobierna en la Casa Blanca por cuenta del complejo petrolero-militar-industrial
y del mundialismo
En sí mismas, las sanciones de la UE son la demostración de la
impotencia de una “federación” construida sobre intereses económicas, incapaz
de adoptar soluciones políticas, y ni siquiera de estar en condiciones de garantizar
la seguridad de sus miembros que se hipoteca al Pentágono.
4) RUSIA ESTÁ EN CONDICIONES DE ELUDIR ESTAS SANCIONES, MÁS QUE
HACE 8 AÑOS
Las sanciones norteamericanas son algo más duras. Y según informan
los medios, pueden tener efectos demoledores sobre la economía rusa. En
realidad, no es así. Y esto por dos motivos:
1) Las sanciones aprobadas en 2014, no surtieron el efecto “demoledor” esperado. La economía rusa no se ha resentido, es más, ha seguido tendiendo puentes a la UE: el Nord Stream, sin ir más lejos, el gaseoducto que garantiza el suministro de gas ruso a Europa. Tal como están concebidas, las sanciones pueden ser mucho más perjudiciales para la UE que para Rusia, en la medida en que implicarán aumentos brutales en el precio de la energía, del gas, de la electricidad y del carburante, así como de sus derivados.
2) Desde 2014 han aparecido las criptomonedas, hoy ya no es necesario pasar por el dólar (ni siquiera por el euro) para realizar operaciones económicas internacionales y burlar cualquier compra de material. Es cierto que la tecnología que avala estas monedas digitales implica la existencia de un “libro contable” en el que quedan registradas todas las operaciones. Es cierto que un hacker de a pie no podría convertir en opacas estas operaciones que implican miles de millones de divisas convencionales, pero un Estado tendría a su alcance los medios para hacer opacas estas operaciones.
5) LA OTAN, VERDADERO “CAPITÁN ARAÑA”
La OTAN, la capacidad militar de los EEUU, existen, sí, pero los
años de la Guerra Fría malacostumbraron al Pentágono: incluso en sus guerras
contra enemigos de escasa entidad (Vietnam, Afganistán, Iraq, etc, etc, etc)
han salido derrotados. El despliegue, por ejemplo, que precedió a la guerra de
Iraq duró meses y solamente se decidieron a realizar ataques con misiles y
bombardeos a gran altitud, cuando estuvo instalado el último chiringuito de MacDonals
en las bases norteamericanas instaladas en Arabia Saudí.
El caso de Ucrania, ha demostrado, no solamente que Europa carece
defensa autónoma, sino que la OTAN ni siquiera está en condiciones de defender
a aquellos a los que invita a entrar en el club.
Ahora sabemos que, en caso de conflicto con Marruecos, no
solamente la OTAN no acudiría en defensa de las posiciones españolas, sino que,
además, ni siquiera podríamos utilizar equipos de fabricación norteamericana.
Algo parecido ocurrió en la guerra de Ifni en los años 50, cuando las bandas
marroquíes atacaron las posiciones españolas y las fuerzas aéreas no pudieron
utilizan ni los F-80, ni los F-86, ni los Douglas DC-3, enviados como ayuda
militar por los EEUU y, por última vez, volaron los Messerschmidt 109,
los Junker 86 y los Heinkel 111 de la Segunda Guerra Mundial… Con
aliados así, no necesitas enemigos.
Las consecuencias militares de este conflicto, nos obligan a
plantear dos cuestiones:
- ¿Para cuándo la disolución de una alianza inútil como la OTAN, creada para la guerra fría y que debía haberse disuelto al concluir esta?
- ¿Para cuándo una defensa europea común digna de tal nombre?
- ¿Para cuándo una política de defensa realista que garantice la independencia, seguridad y capacidad de Europa?
Sí, ya sé que los gobiernos actuales en Europa no tienen
respuestas a algo sobre lo que nunca habían pensado. Subrogando la defensa
europea al “imperio”, lo único que han conseguido es convertirse en “vasallos”
del mismo. ¿O es que, acaso pensáis que los “imperios” tienen “aliados”?