viernes, 11 de mayo de 2018

365 QUEJÍOS (12): HUYAMOS DE LA PUBLICIDAD



Hará algo así como dos décadas, estaba claro que la publicidad se había desmadrado y que los canales generalistas ofrecían excesiva publicidad. Por no hablar de la radio en al que por cada hora de programación, entre 20 y 25 minutos estaban destinados a cortes publicitarios. Una ley quiso regularlo… ley no derogada pero si olvidada. Hoy, nada impide que cada canal coloque de manera abusiva publicidad y más publicidad hasta matar a la gallina de los huevos de oro. ME QUEJO DE LA PUBLICIDAD OMNIPRESENTE E INTERMINABLE, CHIRRIANTE Y CON UNA FALTA DE ORIGINALIDAD RAYANA EN LA INDIGENCIA INTELECTUAL.

¿Puede verse una serie de 20 minutos con dos y tres cortes publicitarios, el último de los cuales se da a pocos segundos de terminal? ¿Pueden soportarse secuencias de cortes publicitarios de 10 e incluso 15 minutos, separadas por un minuto de programación? Bueno, pues ese es el resultado de las televisiones privadas que nacieron en los años 80 y que se ha renunciado a controlar. Carloti, el baranda de Tele 5 ya lo dijo hace algunos años: “yo vendo publicidad, y tengo que poner contenidos para que la gente vea los anuncios”. Imposible ser más claro: la televisión pasó de ser un servicio público a un negocio publicitario desbocado.

Si cuando era un servicio público, nos quejábamos de que solamente había un par de canales nacionales y media docena de canales autonómicos-oficialistas, la irrupción de las televisiones privadas marcó el inicio de la era dorada de las mama-chichos, los culebrones y la telebasura.  Y en eso estamos. Abandonad toda esperanza: a medida que se degrada el nivel cultural de las masas, lo que precisan no son productos sofisticados, sino pura mierda enlatada. Eso es lo que hoy sirven las televisiones generalistas. Y ese ha sido el resultado y más notorio resultado de las televisiones privadas que han cumplido ya las tres décadas.

Lo más sorprendente es que la publicidad ha llegado a invadir algunos canales de pago. Lo que se ha generado ha sido una fuga masiva hacia la televisión es streamming después de una década en la que bajar contenidos a través de programas P2P se había convertido en algo habitual. ¿Podía esperarse otra cosa? El problema de las televisiones privadas, no era que vivieran de la publicidad, sino que han querido vivir demasiado bien.

ME QUEJO DE QUE LA PUBLICIDAD ES UNO MÁS –NO EL ÚNICO, PERO SÍ UNO DE LOS MÁS IMPORTANTES- DE LOS FACTORES QUE HAN CONTRIBUIDO A LA DECADENCIA IRREVERSIBLE DEL MEDIO TELEVISIVO. Y no tenía por qué ser necesariamente así.

- Un medio saturado por publicidad directa e indirecta, no es un medio que pueda transmitir otro valor que los contenidos de los propios anuncios.

- Una publicidad masiva no puede ser sino una publicidad zafia, hecha, no para la satisfacción de la media intelectual de la audiencia, sino al nivel de los estratos de más baja cultura.

- Una publicidad omnipresente desvaloriza cualquier otro contenido televisivo, resta interés, rompe la continuidad de las películas y las series y termina siendo una tortura para el espectador.

- Una publicidad tan poco imaginativa, tan machacona y reiterativa como la actual, además, resulta ser engañosa y en absoluto útil para el espectador.

A lo que habría que añadir los efectos subliminales de los que nadie habla pero que seguramente siguen existiendo (¿o es que alguien ha pensado que el estudio de las técnicas subliminales se interrumpió en los años 50 y nadie se ha interesado desde entonces por ellas?).

Obviamente, no todo son quejas contra la publicidad. LE AGRADEZCO EXTRAORDINARIAMENTE QUE EL RECHAZO A LA PUBLICIDAD HAYA OPERADO EL MILAGRO DE QUE DESDE HACE CASI 20 AÑOS NO VEO TELEVISIÓN, SINO QUE YO MISMO SELECCIONO LOS CONTENIDOS QUE ME INTERESAN. NO ME IMPORTA PAGAR POR VER… LO QUE ME IMPORTA ES QUE NO POLUCIONEN MI CEREBRO CON CIENTOS DE ANUNCIOS POR HORA DE PROGRAMACIÓN.