viernes, 1 de julio de 2016

ANULADAS POR FRAUDE LAS ELECCIONES PRESIDENCIALES EN AUSTRIA


Contra todo pronóstico, contra lo que cabía esperar, el Tribunal Constitucional austríaco ha declarado nulas e invalidado los resultados de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales austríacas. Se trata de una gran victoria de las fuerzas identitarias que apoyaron la candidatura de Norbert Hofer y del FPÖ. 

El Tribunal Constitucional estima que las elecciones del pasado 22 de mayo registraron irregularidades generalizadas y que la victoria por el estrecho margen de 30.000 votos recibidos por correo que proclamó al candidato ecologista vencedor, Alexander van der Bellen, no debe ser tenido en cuenta.


Las elecciones deberán repetirse a principios de octubre o a finales de septiembre. A pesar de que el presidente del Tribunal Constitucional ha declarado tras la lectura de la sentencia que “nadie es el ganador, salvo la democracia”, lo cierto es que está muy claro quién ha ganado y a quien le han robado votos.

Es la segunda vez en una semana que la Unión Europea sufre una sacudida desde sus cimientos. Después del Brexit, cuando se daba por conjurado el “peligro xenófobo y racista” que  hubiera representado una victoria del FPÖ, la UE ha sido la gran perdedora de esta semana. Los partidos que defienden la identidad nacional han impuesto es respeto a la legalidad democrática: después de esto ¿quién se atreverá a definir al FPÖ como “peligro para la democracia”. El único peligro es el de quienes organizaron sistemáticamente el falseamiento de los resultados y que están del lado de los “partidos eurosumisos”.

El escrito de 150 páginas presentado por el FPÖ dando cuenta de todas las irregularidades que tuvieron lugar, fue completado con un pormenorizado estudio del Tribunal Constitucional que añadió otros más: se abrieron los sobres antes del plazo, votaron menores de 16 años. Fueron llamados 90 testigos y muchos de ellos reconocieron que no se cumplió la ley electoral sobre todo a la hora de contabilizar los votos recibidos por correo.