martes, 17 de mayo de 2011

Perspectivas post 22-M


Info-krisis.- Una campaña completamente anodina, absolutamente plana, realizada de espaldas a los ciudadanos, con mítines vacíos de asistentes, consignas previsibles y en medio de perspectivas sombrías por parte de la izquierda y de una victoria de la derecha que no suscita entusiasmos más allá de sus filas, terminará el próximo 22-M con más pena que gloria. Y todos nos alegraremos de que, una vez más, la fiesta electoral concluya.

Es significativo que solamente en el último tramo de la campaña el eje del interés político nacional se haya desplazado de la propia campaña al movimiento de protesta Democracia Real. Eso indica el desinterés de la población hacia la “política oficial” y el estado de ira que empieza a apropiarse de sectores de la juventud. Y esto puede ser un reguero de pólvora que contagie en pocos días a toda una generación que tiene delante suyo el vacío.

Esta es la buena noticia, la mala es que en la Puerta del Sol acampan algunos de los residuos más acrisolados y superficiales del progresismo español: si el rostro más conocido es el de Willy Toledo… casi una caricatura; eso mismo dato indica los límites del movimiento que, a la postre, corre el riesgo de no ser nada más que una enésima expresión de la progresía nacional sin más interés. Veremos si el movimiento es capaz de ir más allá.


De todas formas, salvo que la acampada de la Puerta del Sol en los cuatro próximos días crezca a velocidad asindótica y estalle, lo esencial serán los resultados de las elecciones del domingo. La intención de este artículo es anticiparse a lo que va a ocurrir en los próximos meses. Anticiparse para evitar que las cosas cojan de sorpresa y estemos preparados para lo que se avecina.

El mejor resultado para el 22-M

Ganará la derecha incuestionablemente, falta saber con qué margen y si se tratará de una victoria aplastante o el PSOE conseguirá salvar los muebles y conservar alguna autonomía o capital de provincia. Podemos definir el “mejor resultado” como aquel que incluye tres elementos:

- Presencia significativa de concejales alternativos y/o identitarios (esto es, que denuncien la crisis económica, la inmigración masiva, la corrupción generalizada y la necesaria regeneración del Estado que pasa a través de una profunda reforma constitucional).

- Plto porcentaje de abstenciones, votos en blanco y votos nulos superior al 40%, lo que implicará confirmar el progresivo alejamiento del grueso de la población de los partidos mayoritarios. 

- errota incuestionable y sin paliativos del PSOE que genere el inicio de la descomposición de ese partido y la fractura de las baronías autonómicas en pequeños partidos de centro-izquierda a nivel regional.
 
¿Y esto por qué?

En primer lugar porque la presencia de concejales alternativos y/o identitarios renovará el discurso político y denunciará la política del avestruz practicada por las dos grandes formaciones políticas.

En segundo lugar porque ningún sistema puede eternizarse con la mitad de la población vuelta de espaldas e insolidaria con cualquiera de sus dos grandes opciones.

Finalmente, porque la descomposición del PSOE implicaría el hundimiento de una de las dos columnas sobre las que se sostiene el sistema político español nacido en 1978. Y esto implicaría una inestabilidad creciente que haría necesaria una reforma constitucional: ningún sistema político se mantiene sobre una sola columna…

Lo que nos aguarda el día 23-M

La situación económica sigue yendo mal. Si se ha producido alguna cifra esperanzadora (aumento de exportaciones y llegada de más turistas) se debe no a méritos propios, sino a una coyuntura favorable. Alemania y Francia están creciendo a un 4-5% anual, se trata de nuestros dos principales clientes: si a ellos les va bien, es lógico que nosotros exportemos algo más. En cuanto al turismo, las revueltas árabes han desviado turistas que visitaban esos países hacia España.

Pero estas perspectivas son muy limitadas: el inicio del “recalentamiento” de la economía alemana hace que estén subiendo los tipos de interés como medio de manual para paliar la inflación. Y ese aumento que va bien para contener la inflación en Alemania, supone un menoscabo adicional para la economía española que incluso puede hacer peligrar la venta de deuda pública española (hasta ahora adquirida por bancos españoles con dinero del Banco de España prestado a un interés menos que el que ofrece el Estado por su propia deuda: pero si se produce una subida de tipos de interés, esta operación –carry trade– dejará de ser rentable).

Por otra parte, la llegada de turistas es algo coyuntural: los Estados europeos del Este, especialmente del Adriático (Croacia, Serbia) y de centro-europa están poniendo a punto infraestructuras turísticas nuevas que acompañan a paisajes desconocidos por el turismo y a precios extremadamente accesibles. Confiar en que el turismo siga siendo la gallina de los huevos de oro en España es irresponsable y se trata de esperanzas que serán defraudadas en breve.

La reforma del mercado laboral ha demostrado lo que ya dijimos en Infokrisis: por mucho que se aumente la “productividad” es imposible competir con los mercados chinos. Así que mientras persista la globalización, la economía española está condenada a muerte y le va a ser imposible remontar el vuelo.

Las soluciones clásicas que Europa nos va a imponer son muy simples: recortes, recortes y recortes… especialmente en lo que representa el estado del bienestar. Este es el elemento central que tenemos después del 22-M. El PSOE no iba a aplicar las medidas de ajuste duro antes del 22-M lo que implicaría que su desplome electoral se convertiría en desmantelamiento absoluto. Si el PSOE está dispuesto a aplicar estas medidas (descenso de los salarios de los funcionarios, descenso de las prestaciones sociales, descenso de las coberturas por desempleo, copago en la sanidad, aumento de la presión fiscal, etc) es evidente que lo haría después del 22-M.

Ahora bien…

¿Quién hace el “trabajo sucio”?

Más recortes implica más protestas y más enajenación del voto. Zapatero (que ya no pinta nada ni siquiera en el PSOE) lo intuye. Rubalcaba lo sabe perfectamente. Así pues, si el día 23-M, Zapatero anuncia más medidas, las elecciones generales de marzo de 2012 pueden suponer un fracaso sin precedentes en la socialdemocracia europea.

Por otra parte, entre mayo y octubre se produce un descenso estacional del paro. A partir de octubre, de sin embargo se produce un fenómeno inverso: aumenta sensiblemente hasta Semana Santa. Es un ciclo suficientemente conocido pero que puede ser manipulado por unos o por otros. Las cifras “buenas” del paro durarán pues hasta después del verano, pero no se prolongarán mucho más. Y, desde luego, en el mes de marzo de 2012 habrán llegado o superado hasta los 5.000.000 de parados.

El elemento central de la actual situación política, con Zapatero amortizado es ¿quién hace las reformas que exigen la tiranía de los mercados? Quien lo haga se enajenará la simpatía de la población. Si ZP lo hace el 23-M las perspectivas del PSOE para las elecciones generales de marzo del 2012 convertirán la previsible derrota en hecatombe. Sea la Chacón o el Rubalcaba el candidato (o cualquier otro) lo único que gestionará es la desintegración del PSOE.

Por otra parte, es evidente que los mercados no van a soportar que la agonía de la economía española se prolongue por espacio de 9 meses más. Van a exigir medidas o de lo contrario van a realizar maniobras agresivas contra la economía española. Y solamente hay dos opciones:
-    
      O las reformas se hacen a partir del 23-M con Zapatero en el poder con el resultado del hundimiento total del PSOE,

-          O las reformas se las deja a Rajoy para que se “pringue” con reformas antisociales en beneficio de los mercados lo que menoscabaría su imagen y posición.

Rajoy prefiere que las elecciones se celebren en marzo: sabe que ZP deberá aplicar medidas en esos nueve meses y cuando él suba a la Moncloa, al menos se verá liberado de la hipoteca, será otro el que habrá aplicado el peor paquete de medidas antisociales. Será ZP quien haga la parte más sucia del trabajo a cuenta del capital a cambio de permanecer nueve meses más en el poder.

En el PSOE gana espacio la opinión de que es preciso disolver las cámaras y convocar elecciones anticipadas aun a sabiendas de que se vayan a perder y con la perspectiva de volver al poder cuando la imagen del Rajoy presidente se vea erosionada por haber aplicado medidas impopulares (que, por lo demás, tampoco resolverán el problema…). Si se disuelven ahora las cámaras, el PSOE puede alegar unas cifras de paro que disminuirán durante unos meses, un aumento de las exportaciones que durará mientras Alemania siga creciendo a la velocidad con que lo ha hecho en el último año. En marzo del 2012, en cambio, ya se habrá reproducido un  aumento del paro estacional y está claro que los mercados no permitirán que se llegue hasta entonces sin medidas drásticas.

Lo que se dirime es, pues, si el trabajo sucio lo hace Rajoy o ZP y, por tanto, se les cuelga el sambenito –justificado, por otra parte- de servidores de los mercados y ejecutores del estado del bienestar…

¿Elecciones anticipadas o elecciones en su momento?

Las elecciones solamente pueden tener lugar en dos fechas: o bien en otoño (octubre) o bien en marzo (cuando corresponden). 

El hecho de que ZP haya anunciado su decisión de no presentarse como candidato genera un problema adicional: los mercados saben que no hay nadie en el timón en España. Es una situación de provisionalidad que no puede eternizarse y que obliga casi necesariamente a anticipar las elecciones, algo que, por otra parte, contribuiría a atenuar el previsible destrozo de la sigla PSOE. Otro elemento a tener en cuenta. Nadie que ya ha anunciado que se retirará genera confianza entre los “señores del dinero”. Nadie invierte en un país en el que ni el partido del poder ni el de la oposición son capaces de decir lo que piensan hacer después de las elecciones. 

Por nuestra parte, estamos persuadidos de que tras el 22-M, ZP anunciará la disolución de las cámaras (y si no lo hace el día 23, lo hará en las próximas semanas ante el primer ataque de los mercados, esto es de la alta finanza internacional y ante la perspectiva de una intervención de la economía española por parte de la UE que constituiría el último mazazo, no tanto sobre la socialdemocracia española como sobre la autoestima misma de todo el país.

Los nueve meses que median hasta marzo del 2012, son excesivos como para ZP pueda seguir practicando su “tancredismo” y para que la sigla PSOE pueda aguantar su creciente erosión. Contra más tiempo pase, más difícil va a ser la posición del PSOE. 

Las reformas exigidas por la UE y la alta finanza puede retrasarse solamente si se anuncian elecciones anticipadas para otoño. Lo que implicaría que Rajoy será el próximo presidente y quien firmará las medidas que convulsionen a la sociedad española.

Conclusión

Las perspectivas son, en cualquier caso, malas o malísimas. Gobierne quien gobierne la lógica neoliberal vigente en Europa implica ajustes duros que pagará la sociedad. De ahí la importancia que tienen no tanto movimientos improvisados y superficiales como el de la protesta de Democracia Real Ya, como los niveles de abstención y la llegada de concejales “disidentes” del sistema bipartidista. Por otra parte, como ya hemos dicho, el hundimiento del PSOE implicará certificar la agonía del sistema de equilibrios políticos surgidos con la constitución de 1978. La reforma constitucional se haría ineludible para el período 2012-2014.

Las modificaciones en la ley electoral realizadas casi clandestinamente (el hecho de que para presentar listas a partir de las próximas generales sea necesario recabar el 0’1% de firmas del padrón municipal) harán imposible que nuevamente se presentes decenas de listas en las 50 provincias. Forzarán a convergencias entre formaciones políticas minoritarias y quien no lo entienda quedará marginado para siempre e incluso sin posibilidades de presentarse físicamente.

Vivimos una situación que progresivamente se va complicando y que demuestra que, lejos de verse luz en el túnel, la oscuridad se va haciendo más densa.

© Ernest Milà – Infokrisis – Infokrisis@yahoo.eshttp://infokrisis.blogia.comhttp://info-krisis.blogia.com – Prohibida la reproducción de este texto sin indicar origen.