Info|krisis.- La firma
apresurada de un “pacto antiterrorista” entre el PP y el PSOE, con ausencia de
cualquier otro grupo parlamentario, tiene una importancia que excede con mucho
el objetivo que dicen perseguir ambos partidos: combatir el yihadismo. De
hecho, este pacto sirve para cualquier cosa menos para eso. Imaginemos a un par
de cazadores furtivos que suscriben un acuerdo para denunciar el peligro de la
caza para la desaparición de ciertas especies. Algo parecido es este acuerdo
anti-yihadista suscrito por las dos formaciones que son, precisamente, las que
han abierto las puertas al Islam en nuestro país.
La sobreactuación del PP y las responsabilidades reales
Como siempre, los representantes
del PP han sobreactuado. Como Aznar cuando decía que enviaba tropas a Iraq para
“combatir el terrorismo de ETA”, o como cuando Rajoy ve con lente de aumento
cualquier leve mejora en las cifras macroeconómicas, percibiendo una
recuperación que nunca acaba de llegar para el ciudadano de a pie. Ahora ha
sido García-Margallo quien ha afirmado que el “yihadismo es el fenómeno más grave que la humanidad ha enfrentado
desde 1945”. Sobreactuación. El islamismo radical es, efectivamente, uno de
los fenómenos más graves que afronta Europa (no la “humanidad”), pero no desde
1945, sino desde que los EEUU contrataron a Bin Laden para que les hostigara a
los soldados soviéticos en Afganistán o, incluso, desde que Aznar abrió las
puertas a la inmigración islámica en España en 1996.