Querido Diario:
Estaré en San José de Costa Rica
todavía unas semanas más por razones familiares y de trabajo, pero espero poder
desplazarme a Liberia a lo largo del mes de noviembre. Cuando se llega a Centroamérica uno asume que en
cualquier momento puede ocurrir un terremoto. Y hace un par de años que
no tiene lugar ninguno, así que ya está tocando. Llegué aquí hace dos semanas
con esta convicción: viviría un terremoto, una de esas situaciones curiosas que
quien la ha vivido no puede olvidarla. Es una experiencia nueva ante la que no
puede hacerse nada. La
tierra se mueve, todo se mueve y tú adviertes una sensación que nunca antes
habías experimentado. ¡Qué queréis que os diga! ¡me gusta todo aquello
que desconozco, incluso en el momento en el que me toque morir pensaré feliz
que, finalmente, voy a descubrir lo que hay después de la vida (algo que más o
menos intuyo)! Lo “parajódico” de la situación es que uno se viene a “las
Américas” con la idea de que, de un momento a otro, la tierra puede temblar y,
sin embargo, es en el punto de partida, en España, en donde se ha producido el
terremoto. Y no en sentido alegórico político, sino en sentido estrictamente geológico.
Parece que ha sido de 3,7 grados en la escala de Richter y ha afectado al
centro-sur de la Península, aunque algo mayor ha sido el que ha afectado a
Cataluña, 4,1 grados, cuyo epicentro ha tenido lugar en el Alt Empordá… una de
las zonas más soberanistas, por cierto.
Por cierto, sabéis aquel chiste
sobre un puesto de la guardia civil que recibe un cable de la comandancia: “Detectado
movimiento sísmico, localicen el epicentro”. Durante semanas aquel cable
permanece sin respuesta, pero finalmente la comandancia recibe un comunicado
del puesto: “Desarticulado movimiento sísmico, detenido el epicentro y sus
cómplices. No hemos podido contactar antes porque ha habido un terremoto de
puta madre”… bueno, pues eso, que lo que espero es leer que el “movimiento sísmico”, los Mas, las “tietas”, la
legión de los corruptos y sus mariechis, van entrando en la Cárcel Modelo.
Preferentemente sin otro terremoto.
SALARIOS BAJOS… BAJOS INGRESOS EN LA SEGURIDAD SOCIAL. GANAN ALGUNAS
PATRONALES, PIERDE EL ESTADO, ESTO ES, LA SOCIEDAD
Lo salarios han ido bajando en relación al coste de la
vida desde la segunda mitad de los años 70. No sólo los españoles hemos perdido
poder adquisitivo. En prácticamente todo el mundo se ha reproducido esta
tendencia. A partir de 1989, el proceso se volvió dramático: la globalización hizo que los
salarios de los trabajadores europeos debieran competir con los de China o el
sudeste asiático.
El problema era que, hasta ese
momento y desde el fordismo, la política empresarial consistía en convertir a los trabajadores
alienados en consumidores integrados y para ello era preciso darles un salario
que les permitiera acceder a niveles mayores de consumo: así la producción
podría ir aumentando y con ella los beneficios. Sin embargo, a partir de la globalización
este principio puesto en práctica inicialmente por Henri Ford, quedó sustituido
por el de la “competitividad”, es decir, igualar salarios por lo bajo
con China para así conseguir exportar más.
Este es el verdadero problema de
la Seguridad Social: que cuanto
más bajos son los salarios, más bajas son las cotizaciones y menores los
ingresos de cara al pago de pensiones. Y esta es la verdadera causa por lo que
el sistema de pensiones está en crisis. Esto es lo que ha provocado este
año el que la economía
española creciera un 3%, aumentara el empleo, pero bajaran las percepciones
salariales… y la SS recaudara menos
alcanzando un déficit de ¡5.291 millones de euros! Este proceso
endiablado solamente tiene una salida: detener la globalización, restablecer
aranceles y repatriar los excedentes de inmigración a fin de que el mercado
laboral no tenga un ejército permanente de parados que tiren hacia abajo los
salarios. ¿Otra solución? ABSOLUTAMENTE NINGUNA MAS
PRIMEROS DÍAS DEL NUEVO PARLAMENT DE CATALUNYA: ENTRE EL CAOS Y LA
INESTABILIDAD HASTA EL 20-D
Junts pel Sí y la CUP tienen prisa por iniciar la “desconexión”
y los actos de “desobediencia”. Tales serían los resultados de la resolución
adoptada en la primera sesión del Parlament el pasado martes. Tienen prisa y la
seguirán teniendo durante todo el mes de noviembre: España está sin parlamento
y con un gobierno en funciones. Diferente será en la noche del 20-D cuando el
país tenga un nuevo gobierno: los soberanistas saben que no tienen nada que negociar con Ciudadanos (cuyo
líder, sencillamente, les odia), ni con el PP cuyos dirigentes, en los últimos
cuatro años han dejado de hablar catalán en familia. En cuanto al PSOE, el acto
de fe unitarista-constitucionalista de Pedro Sánchez no deja lugar a dudas:
está en el “frente constitucionalista” por mucho que en Cataluña Iceta
se obstine en practicar una equidistancia imposible de mantener.
Pero el problema radica en que si
los soberanistas tienen prisa por dar pasos hacia la desconexión (y el 20-D se
verá cómo acogerá su electorado todo lo que ocurra hasta entonces y si se
repiten los mismos porcentajes de votos que el 27-S), los partidos unitaristas-constitucionalistas en
Cataluña aspiran a ralentizar al máximo el proceso a la espera de bloquearlo
hasta más allá del 20-D y utilizarán todas las triquiñuelas que estén en
su mano para ganar día a día y hora a hora ese tiempo que es la única válvula
de oxígeno de que dispone Artur Mas y sus soberanismo.
Ciudadanos, PSC y PP han
paralizado la resolución de Junts pel
Sí-CUP reclamando un “informe jurídico sobre la moción” que ha obligado a
la Mesa del Parlament a posponer la tramitación de urgencia del texto. Para colmo
el PP todavía no se ha constituido como grupo parlamentario, lo que impone la
reunión de la Junta de Portavoces… Las razones que argumentan unos y otros es
que el texto de la moción es contrario a la Constitución y al Estatut. Los
socialistas por su parte piden que la moción se tramite cuando haya un nuevo
gobierno catalán…
¡Que importan los argumentos si de
lo que se trata es de ganar tiempo! (y, a todo esto, ¿qué pasa con la gestión
del día a día, con los hospitales en los que muere gente por falta de
presupuesto o de las farmacias que sufren para cobrar un euro de la
generalitat, qué pasa con los asuntos que no devengan comisión? El soberanismo lleva 10 años
paralizando la vida catalana.
TURQUIA NUNCA DEBE ENTRAR EN LA UNIÓN EUROPEA… NI ERA EUROPA NI LO ES
AHORA TAL COMO DEMUESTRA ERDOGÁN CADA DÍA
Hace diez años de debatía si la
Unión Europea era un “club cristiano” y el debate venía a propósito de que George Bush apoyaba la
incorporación de Turquía a la UE, apoyado por sus perros de presa en Europa,
José María Aznar y Tony Blair. Aquel debate, sin pies ni cabeza (era
evidente que solamente una parte de Turquía, Tracia, está en territorio europeo
como resto del Imperio Otomano nacido con la invasión turca del Imperio Romano
de Oriente) y era evidente
también que los factores antropológicos, económicos, culturales y sociales, de
Turquía no tienen nada que ver con Europa. Algunos sectores del gobierno
turco de Erdogán se dieron por enterados e iniciaron una nueva política para
ampliar su influencia hacia el sur y hacia el Este de Turquía, no tanto por
despecho hacia la UE como por realismo. Solamente Obama sigue predicando en el
desierto la incorporación turca a la UE.
Pero las condiciones políticas de Turquía siguen siendo
de inestabilidad política y tosquedad democrática. Erdogán sigue siendo
un pequeño dictador elegido en una democracia formal que solo tiene de
democrático el hecho de colocar un voto en una urna cada cuatro años. Basta con
criticar a Erdogán en un medio de comunicación para hacerse sospechoso de
traición y objeto de castigos policiales.
Es lo que le ha ocurrido al grupo
de comunicación Koza Ipek, crítico con el gobierno. Erdogán cortó las
transmisiones de los canales Kanaltürk y Bugün TV poco antes de las elecciones
que se celebrarán el 1 de noviembre. No contento con eso, la policía invadió
los canales de TV críticos. “Esta
es mi libertad, si la criticas dejas de disfrutar de ella…”, tal es la divisa
del gobierno Erdogán.
Lo más sorprendente, con todo, no
es eso, sino el hecho de que los
canales intervenidos pertenecen al movimiento fundamentalista islámico del
clérigo Fethullah Gülen… Y resulta sorprendente porque Erdogán es
presidente en tanto que candidato del partido islamista moderado de la Justicia
y el Desarrollo, partido cuya ala más radical y cuyo electorado está siendo
roído por Gülen.
PROFESIONALIDAD Y ÉTICA EN TV3: EMISION DE UN DOCUMENTAL SOBRE LA
CORRUPCIÓN… EN FRANCIA. EL “PROCÉS” GANANDO AMIGOS
En Catalunya está cayendo una “pedregada”
sobre CDC y sus distintas cúpulas históricas que el partido que en otro tiempo
representó al “nacionalismo moderado” y hoy es sinónimo de “cleptomanía política”,
difícilmente soportará. Esto que anticipamos, podrá verse dramáticamente el
próximo 20-D cuando CDC se presente sola sin el blindaje protector de una
coalición como Junts pel Sí. CDC muere asfixiada por la
pestilencia que exhala su propia corrupción. El declive del nacionalismo
moderado es inevitable e irreversible.
Pues bien, cuando parece que las
cloacas catalanas empiezan a desembozarse, TV3, ese canal émulo de Pol Pot y del mismísimo Stalin,
decide aludir al tema de moda en Cataluña: la corrupción, pero no lo hace en
clave catalana, sino denunciando las tramas de corrupción que se dan en la
vecina Francia. Uno de los entrevistados en dicho programa es Núria Bassols… comisionada para
la Transparencia de la Generalitat y esposa de Josep Manel Bassols, detenido
hace unos días por la financiación irregular de CDC. Se insiste sobre
todo en que los procesos de corrupción en Francia tienen a la Unión de Bancos
Suizos como principal imputado. Y eso es todo.
El reportaje no aporta gran cosa
a la ciencia periodística, ni siquiera a la política tradicional de la Generalitad que sostiene
desde hace 37 años que no existen problemas en Cataluña y que todos los
problemas solamente existen al Sur del Ebro. Ahora resulta que tampoco
hay problemas en Cataluña pero sí al Norte de los Pirineos. Justo pago ante el jacobinismo francés
y su cerrazón a mantener cualquier tipo de diálogo con la Generalitat (salvo la
boutade de Manuel Valls sobre que el Barça tiene las puertas abiertas en la
liga francesa, claro, pero es Valls y no cuenta).